¿Te gusta el otoño? ¿Prefieres la época de bañarte en el mar, o espera con impaciencia que bajen las temperaturas y que los árboles cambien de color? Para muchas personas , el paso de verano a otoño puede ser una época difícil, ya que puede marcar el inicio del TAE (Trastorno Afectivo Estacional). Esto se debe a que, a veces, el organismo se resiente cuando debe adaptarse a la disminución de horas de luz natural.
El TAE se mencionó por primera vez en un artículo del psiquiatra Norman Rosenthal en 1984 en el que utilizó el término para describir a un grupo que estaba estudiando en Maryland. Desde entonces, se ha observado el fenómeno en todo el mundo, tanto en el hemisferio norte como en el sur, sobre todo en los países y regiones más alejados del ecuador.
LOS SÍNTOMAS Y TRATAMIENTOS DE TAE
Aunque aún desconocemos el desencadenante exacto, se sospecha que el TAE puede a veces ser genético ya que la causa más evidente es la falta de luz natural Por otro lado, parece ser cuatro veces más frecuente en mujeres que en hombres. Quienes la padecen descubren que no pueden manejar situaciones estresantes con el mismo éxito que en otras épocas del año.
Los síntomas del TAE pueden incluir:
- un estado de ánimo persistentemente bajo
- pérdida de interés por las actividades cotidianas normales
- sentimientos de desesperación, culpa e inutilidad
- falta de energía y somnolencia durante el día
- dormir más de lo normal y tener dificultades para levantarse por la mañana
- antojo de hidratos de carbono y de dulces
- dificultad para concentrarse
- disminución del deseo sexual
Si crees que puede padecer TAE, lo primero que debes hacer es acudir a tu médico. Es la persona indicada para indicarle el mejor tratamiento según tus necesidades.
Se ha demostrado que salir a pasear todas las mañanas ayuda a aliviar los síntomas del TAE. Photo by
Los tratamientos habituales incluyen el uso de cajas de luz, ejercicio y suplementos de vitamina D. Aunque esté nublado y no te apetezca, sal a dar un paseo de día. Así, absorberás algo de vitamina D, y tu cuerpo, al moverse, liberará esas codiciadas endorfinas que te ayudarán a combatir la tristeza invernal.
“Cualquier cosa que te haga salir, que te mantenga físicamente activo, será una buena psicoterapia y evitará los problemas invernales.”
― Jon Krakauer, Eiger Dreams: Ventures Among Men and Mountains
SINTONIZAR CON LOS BENEFICIOS DEL IKIGAI Y EL IBASHO
Esto me hace pensar en el ikigai al TAE. Si conectas con la el motivo que te hace levantarte por las mañanas, hay más posibilidades de que sientas una mayor conexión contigo mismo. Tómate un momento para disfrutar de tu té o café por la mañana, por ejemplo. O da un pequeño paso hacia un objetivo vital (escribir una novela, planificar un viaje o entrenar para una maratón). Cualquiera de estas acciones puede ser de gran ayuda en esos momentos de oscuridad. Del mismo modo, creo que el ibasho también puede ayudar con el TAE. Es otro concepto japonés que aspira a reforzar el propio sentido de autenticidad dentro de un lugar o una comunidad. Centrado en aprovechar los conocimientos y la sabiduría de los ancianos, pretende ayudar a la comunidad en general. Al conectar con dónde y con quién sientes que puedes ser tú mismo de verdad, tienes más probabilidades de enraizarte. Lo cual es un maravilloso complemento a lo que pueda sugerir tu médico.
Además, una forma estupenda de llevar un registro de cómo te sientes y aprovechar el apoyo de una comunidad en línea es a través de la página web 29k app. Desarrollada por psicólogos, es una herramienta gratuita que puede utilizarse para hacer un seguimiento de cómo te sientes, trabajar técnicas de meditación y ayudar a controlar el estrés.
La aplicación también es útil para personas neurodivergentes y, por supuesto, no dudes en ponerte en contacto conmigo para pedirme ayuda sobre cualquiera de las cuestiones planteadas en este post. feel free to reach out to me for help on any of the issues raised in this post.